Introducción 

La música es un arte poderoso que trasciende fronteras y géneros, y dentro de esa inmensa paleta musical, se encuentra nuestra pasión: la guitarra clásica. Hace algún tiempo, decidimos hacer un proyecto que combina dos mundos aparentemente opuestos: las canciones comerciales actuales y la expresión única de la guitarra clásica.

Para empezar con nuestra propuesta, tomamos la canción “200 Copas” de Karol G para hacer un arreglo de ella en guitarra. ¿Cómo podíamos mantener la esencia urbana de la canción mientras le otorgábamos un carácter clásico? Esta interrogante nos impulsó a sumergirnos en un emocionante proceso creativo.

En este escrito, queremos compartir diversos aspectos destacados de este arreglo que podrían llamar tu atención.

Contexto 

“200 Copas” forma parte del repertorio de la cantante colombiana Karol G, reconocida cantante en la música urbana latina. La canción fue lanzada como parte de su álbum “KG0516”, publicado en 2021.

La canción se distingue por su característico ritmo (corrido tumbado) y su letra que narra una historia de desamor. En la canción, Karol G expresa la intensidad de sus emociones, recurriendo a la metáfora de beber “200 copas” para tratar de olvidar a su antiguo amor y superar el dolor que le ha dejado.

En este tema, se aparta del reggaetón y el trap para explorar el estilo del corrido tumbado, un subgénero en auge dentro de la música regional mexicana, lo cual ha contribuido a su alta cantidad de reproducciones.

Adaptar esta canción para la guitarra clásica representa una oportunidad para experimentar con la expresividad de este instrumento y llevarla a terrenos inexplorados, mezclando lo urbano con lo clásico de una manera innovadora.

Proceso creativo

En este arreglo, intentamos transformar la energía urbana de la canción original en una expresión que se ajustara al carácter distintivo de la guitarra. Aquí detallamos los pasos que se siguieron en la creación:

• 1. Transcripción:

Comenzamos transcribiendo la melodía original de la canción. Esto nos brindó una base para construir la armonía que acompañaría la melodía en nuestro arreglo.

• 2. Construcción de la armonía y definición del ritmo:

Basándonos en la melodía transcrita, desarrollamos la armonía que enmarcaría la adaptación. Definir los acordes y la progresión armónica fue esencial para mantener la esencia de la canción original en el contexto de la guitarra clásica. También determinamos el ritmo que permitiría una buena y coherente interpretación técnica en este instrumento.

• 3. Experimentación con dinámicas y matices:

Procedimos a experimentar con dinámicas y matices una vez que la armonía y el ritmo estuvieron definidos. Ajustamos la intensidad de las notas y acordes para comunicar las emociones y la atmósfera de la canción de manera auténtica. Esta etapa añadió profundidad y expresividad al arreglo.

Elementos Destacados

1. Inclusion de “Tusa” en la Introducción:

La introducción del arreglo tiene inspiración en el inicio de la canción “Tusa” de Karol G. Al incorporar elementos de “Tusa”, creamos un puente musical que conecta las dos canciones y proporciona un inicio familiar a los oyentes.

Tusa 

2. Cambio de métrica y tonalidad:

Una de las transformaciones notables es el cambio de métrica y tonalidad. Mientras que la melodía original de “Tusa” está en 4/4 y en Si menor, cambiamos la métrica a 3/4 y la tonalidad a La menor para establecer la atmósfera correspondiente a “200 Copas”.

200 Copas 

3. Introducción:

La introducción del arreglo se extiende a lo largo de 25 compases, permitiéndonos construir un ambiente que prepara a los oyentes para la transición a la canción principal. Durante estos compases, se puede escuchar la relación que tiene la introducción con la melodía inicial de “Tusa”. 

4. Transición a la melodía principal.

Entre los compases 21 y 26 hay una pequeña transición. Este tramo musical actúa como un enlace hacia la melodía central de “200 Copas” que permite introducir el inicio del tema principal.

Además de los elementos antes expuestos dentro del desarrollo de creación del arreglo, se recurrió a lo que en literatura se denomina “Intertextualidad”, es decir, utilizar recursos de otras  piezas dentro de una creación presente. Para este fin, se empleó la esencia del vals, un género que ha permeado todas las vertientes musicales latinoamericanas, incluido por supuesto el corrido tumbado mexicano.

Ahora bien, puesto que el vals es un género puramente europeo y que fue asumido por los criollos en Latinoamérica durante la época colonial y más exactamente en los movimientos independentistas del siglo XIX, se decidió incorporar la esencia juguetona del “Vals de las flores”, del compositor ruso Tchaikovsky, para crear un efecto de ambigüedad entre lo carnavalesco de un vals y la absoluta tristeza causada por la decepción amorosa (ver primeros compases después de la cadencia del arpa).

Vals de las Flores – Tchaikovsky

En definitiva, la idea de llevar una canción de género urbano al contexto académico implica crear la conciencia en los nuevos intérpretes de guitarra, ya sea de forma profesional o empírica, de que no hay una diferencia considerable a nivel de estética, pues incluso al explorar creaciones que hoy en día son obras canónicas, se encuentra evidencia de que en su estructura existen elementos populares y quizás por eso no resulta difícil creer que en las fuentes populares está el germen de la nueva música.

Estos elementos subrayan cómo adaptamos la canción “200 Copas” en una interpretación para guitarra clásica. Nuestra intención fue capturar la esencia emocional de la canción original mientras le añadíamos un matiz acústico. La combinación de estos elementos permite que nuestro arreglo sea una experiencia musical diferente para este tipo de música comercial.  Si bien no es novedoso llevar este tipo de canciones a un entorno clásico o acústico (por llamarlo de alguna manera), nuestro enfoque se orienta hacia otra dirección: contribuir al repertorio de guitarra clásica a partir de la música comercial o popular que la gente disfruta cotidianamente, enriqueciendo así la experiencia de aprender a tocar la guitarra con sonidos cercanos y familiares.